Cuando alguien te saca de tus cabales, es porque vemos en esta persona un aspecto que existe en nosotros también. Esto se llama "Sombra" y todos los aspectos ocultos o inconscientes de uno mismo, tanto positivos como negativos, que el ego ha reprimido o nunca ha reconocido, es la sombra.
A nivel familiar, de pareja o social, podemos claramente encontrar ejemplos que nos muestran la comunicación y el respeto corrompido; y otros en los que el abuso, la violencia en la comunicación, la poca tolerancia, son norma cotidiana. Lo malo es que terminamos acostumbrándonos a las pequeñeces, y exageramos el mal humor perdiendo la preciada paciencia.
Desafortunadamente la sociedad de hoy en día, ofrece aspectos preocupantes en los que pareciera que el ser humano ha perdido la brújula de su existencia y la calidad de su esencia.
La paciencia es todo un tema, y solo hay que fijarse un poco, para darse cuenta del mal humor, los miedos y rabias que absorben la vida, como si fuera una deliciosa hamburguesa que saciara nuestra hambre.
La prisa, el correr alterado y el poco estar presente en nuestro trato, el andar tan de prisa, nos impiden tener las vivencias de este ahora, de este presente y sentir la vida en toda su magnitud. Se nos olvida lo que es la vida.
Si eventualmente nos proponemos realizar la paciencia en nosotros no me cabe ninguna duda que podremos permite ver con claridad el origen de los problemas y la mejor manera de solucionarlos
La virtud es aprender a desarrollar con ánimo tranquilo y perseverante el control de aquello que tanto nos molesta, controlarnos en la mente que genera formas de pensamiento que a posterior nos comen y sabotean nuestras buenas intenciones.
La paciencia no implica ser pasivo o indiferente antes los acontecimientos o creer que nada nos molesta, es simplemente capacitarnos en la virtud de la fortaleza interna, mirar que la vida tiene sus pruebas, y que de una manera u otra nos están templando para un fin superior, pero si no hemos pasado las mínimas pruebas de dolor y que sea el AMOR quien nos ayude a resolver el entorno, podría ser caótico y dramático.
La néurosis seria compañera fiel en nuestros intercambios, quedándonos en muchos casos con un mínimo de personas que desearan compartir con nosotros.
M e parece que el camino correcto sería la identificación con nuestro Yo Superior, con el Maestro Intimo, con la Luz Mayor o como deseen llamarla
Al parecer muchos dicen que la paciencia es un signo de madurez y claridad mental.
Es saber que todo llega en su momento oportuno, que todo es por algo y que de alguna manera nos mostraran la necesidad de aprender esto, aunque nos duela, sobre todo en este mundo donde todo es rapidez, estrés, angustia y muy aprisa.
Al desarrollar la paciencia podremos identificar nuestros sentimientos negativos como así nuestras alegrías y triunfos trabajar aquello que deseamos cambiar y con perseverancia y amor por nosotros mismos, vivir un presente más dichoso y feliz.
El discernimiento nos permitirá evaluar nuestras respuestas a los momentos vividos y que después no tengamos que arrepentirnos por nuestra impaciencia y poca inteligencia para decir o actuar.
Paciencia, tolerancia y amor son opciones para vivir mejor y todo depende de lo que queremos y de nuestros deseos de evolución y perseverancia.
Atraemos a gente que refleja nuestras propias características negativas. Por eso hay que tener cuidado a la hora de perder la paciencia o juzgar locuazmente.
Es por ello que estas personas de mal humor e intolerancia están en nuestras vidas, para enseñarnos, darnos una oportunidad de transformarnos a nosotros mismos y a nuestra ira.
Es en estos momentos de oscuridad en los que podemos encontrar la Luz, tan solo si permitimos transformar nuestra naturaleza y no reaccionamos con ira, la vida mejorará un poco cada vez que cambiemos. Y lentamente podremos experimentar el propósito de nuestra vida: la realización, y con gran esfuerzo la iluminación.
Preguntas para reflexionar, dirigidas a tu Ser Interno:
¿Cuánta paciencia tienes con los tuyos, los aguantas y toleras?
¿Llegas y hablas impulsivamente o piensas lo que dices?
¿Puedes neutralizar tu rabia con amor y compasión?
¿Con quién pierdes la paciencia y como lo solucionas?
¿Te expresas amor por ti, o vives en la autocritica?
--María Soledad Peñafiel